Los robos de energía se refieren a cuando una persona se alimenta de nuestra energía, afectándonos de una forma emocional, psíquica o física. Las personas que lo realizan suelen presentar rasgos de falta de empatía, sensibilidad y madurez emocional. Debido al dolor o la inseguridad que experimentan internamente, los robos de energía se basan en depender de la energía de los demás para intentar aliviar la suya propia.
Los robos de energía pueden manifestarse en cualquier tipo de relación que podemos tener, como amigos, familiares, conocidos, hijos, hijas y parejas. Si eres una persona empática y cariñosa, puedes atraer a personas que se nutran de tu energía sin que te des cuenta. Lamentablemente, si eres una persona compasiva y no sabes establecer límites, es probable que estés rodeado de este tipo de personas en este momento. Estas se sienten atraídos por ti porque buscan resolver un problema profundo en su psique y te ven como la solución a sus problemas.
Es por ello que seguramente, después de una conversación con este tipo de personas, te sientas agotado y deseando no haber salido de casa, mientras que por el contrario, también existen relaciones donde te acabes totalmente revitalizado y lleno de energía.
Los Cordones de Energía
Cuando iniciamos cualquier tipo de relación, se empiezan a crear uniones entre las personas a través de lazos o cordones de energía. A través de ellos se inicia una circulación constante de energía en el momento de la interacción con la otra persona. A medida que estas relaciones se fortifican, la circulación de energía se intensifica y se vuelve mas estable.
Lo perfecto seria nutrir los cordones de energía positiva y de manera equilibrada de ida y vuelta para que la energía fluya entre las dos personas de una manera equitativa, pero…. puede haber momentos en los que un individuo necesite más energía que otro, quiera acaparar toda la energía en circulación o desee sustraerla de la otra persona para satisfacer sus propias necesidades o recargarse de energía.
Cuando aparece este desequilibrio es cuando aparecen los robos de energía, ya que una parte es la que entrega y la otra se dedica solo a recibir, en vez de ser un movimiento uniforme de ida y vuelta de la energía.
6 Tipos de Robos de energía
A pesar de que es comprensible sentir cierto resentimiento hacia las personas que realizan estos robos energéticos, es crucial recordar que ellos aún no han aprendido a manejar sus propios problemas. Sin embargo, es esencial tener en cuenta que tu NO eres el responsable de solucionar sus problemas. Es solo responsabilidad de ellos aprender a lidiar con sus propios conflictos y resolverlos por sí mismos.
La presencia constante de robos de energía puede llevarnos a sentirnos tan agotados que se nos haga difícil hasta cuidarnos a nosotros mismos. Una interacción prolongada puede generar en nosotros sentimientos crónicos de fatiga, depresión, ansiedad, irritabilidad o enojo.
Es esencial aprender a establecer unos límites y trazar una línea clara alrededor de este tipo de personas. Identificar los diferentes tipos de robos de energía en nuestra vida es fundamental para poder cuidarnos y ser asertivos. Sin esta habilidad, puede resultar complicado practicar la auto-nutrición y defender nuestras propias necesidades emocionales y energéticas.
Aquí están los tipos principales de robos de energía:
1. La víctima o el mártir
Las personas que realizan estos robos de energía adoptan la postura de víctimas o mártires. Suelen aprovecharse del sentimiento de culpa para obtener la atención y la simpatía de los demás. Estas personas creen que son unas víctimas del mundo y que su sufrimiento se debe principalmente a otros. Es por ello que inconscientemente intentamos darles nuestra energía para calmar su sufrimiento.
En lugar de asumir la responsabilidad de sus vidas, las personas víctimas o mártires suelen culpar, manipular y chantajear emocionalmente a los demás, y pueden dejar a aquellos que los rodean agotados y emocionalmente drenados. Este comportamiento disfuncional se debe a su baja autoestima. Al no recibir constantemente signos de amor, agradecimiento y aprobación, estas personas se sienten indignas e inaceptables. Intentan resolver esto haciéndote sentir culpable y absorbiendo tu simpatía / empatía.
Cómo nutrir tu energía: Si estás cerca de un víctima o mártir, es importante que estés atento a todas las señales de la autocompasión. Estas señales pueden incluir la tendencia de la persona a culpar a otros por su sufrimiento o a describir en detalle lo mal que ha sido su día. No te involucres en su autocompasión. Si es posible, limita tu interacción con ellos.
2. El Narcisista
Una persona narcisista tiene muy poca capacidad para mostrar empatía o interés hacia otras personas. Estas operan bajo la filosofía inconsciente del «YO primero, tú segundo». Por lo tanto, esperan constantemente que los demás los pongan primero, alimenten sus egos y hagan lo que ellos dicen. Estas personas pueden manipular con su falso encanto, pero también pueden traicionarte rápidamente. Si existe un narcisista en tu vida, es posible que sientas una sensación de pérdida de poder al sentirte aplastado bajo su forma de ser. Es importante establecer límites claros con ellos y mantenerse firme en tus decisiones y necesidades personales.
Cómo nutrir tu energía: Si no es posible desconectar completamente a una persona de estas características de tu vida en este momento, es importante limitar el contacto con el narcisista. También puedes intentar mostrarle cómo sus solicitudes satisfacen únicamente sus propios intereses, especialmente si estás en una relación laboral o personal. Establecer límites firmes es fundamental para proteger tu energía y bienestar emocional cuando interactúes con un narcisista. Mantén una comunicación clara y asertiva, y evita ser arrastrado por su manipulación y control.
3. El dominador
Las personas dominadoras, a menudo tienen profundas inseguridades internas y buscan sentirse superiores a los demás para compensar sus sentimientos de debilidad e inseguridad. Buscan intimidarte y controlarte para sentirse poderosos y seguros. Es común que los dominadores tengan creencias rígidas y percepciones del mundo en blanco y negro, lo que puede manifestarse en actitudes racistas, sexistas y/o intolerantes.
Cómo nutrir tu energía: Aprende a estar en desacuerdo con los dominadores y a practicar la asertividad cuando sea necesario. Limita tu contacto con ellos y entiende que su intento de intimidarte surge de su profundo miedo a ser dominados y, por lo tanto, heridos. Es importante tener en cuenta que no tienes la responsabilidad de cambiar sus creencias, pero puedes establecer límites claros para protegerte a ti mismo y a los demás de su comportamiento abusivo.
4. El melodramático
Los robos de energía de una persona melodramática, a menudo se basan por la atracción por crear problemas y dramatizar situaciones, lo que puede ser producto de un vacío emocional en sus vidas. Su necesidad constante de dramatizar situaciones les da una razón para sentirse víctimas, lo que les da una sensación de importancia y justificación. A menudo, los melodramáticos evitan los verdaderos problemas de la vida y buscan crisis como formas de escapismo. Además, las emociones negativas a las que se aferran son adictivas y pueden proporcionar una sensación temporal de emoción intensa.
Cómo nutrir tu energía: Evita tomar partido o involucrarte con el melodramático. En lugar de ello, observa sus patrones de comportamiento y los factores desencadenantes que te hacen sentir tentado a involucrarte. Si puedes, mantén distancia y limítalos en tu vida para que no puedan agotar tu energía emocional. Recuerda que tu bienestar emocional es importante y que tienes el derecho de protegerlo.
5. El crítico
Los robos de energía de personas críticas, a menudo se originan por tener una autoestima baja y busca reforzar su sentido de superioridad criticando a los demás. Sus juicios no tienen nada que ver con la otra persona y se centran en su propia inseguridad y necesidad de control aunque ellos nos se den cuenta. El crítico puede hacer que te sientas pequeño, impotente y avergonzado, pero recuerda que sus críticas no tienen un valor real y no reflejan tu verdadero valor como persona.
Cómo nutrir tu energía: Recuerda que la verdadera autoestima proviene de nuestro interior. No permitas que el crítico te haga sentir pequeño o avergonzado. Reconoce que su comportamiento es una manifestación de sus propias inseguridades y baja autoestima, y no tiene nada que ver contigo. Trata de no tomar sus comentarios de manera personal. Si es posible, trata de ser amable y compasivo con ellos, aunque esto puede resultar difícil. Limita tu contacto con ellos si es necesario para proteger tu propia energía y autoestima. Recuerda que eres digno de amor y respeto, independientemente de lo que el pueda decir o hacer.
6. El inocente
Los robos de energía no siempre vienen de personas maliciosas, como es el caso de los inocentes. A veces pueden ser personas indefensas que realmente necesitan ayuda, como niños o buenos amigos que dependen demasiado de ti. Si bien es bueno ayudar a aquellos que te importan, también es importante establecer límites y animarles a ser más autosuficientes. Si te conviertes en su soporte, puede llegar a desgastar tu energía. Por lo tanto, es importante equilibrar la ayuda que les ofrezcas con la autodisciplina, con el objetivo también de cuidar de ti mismo.
Cómo nutrir tu energía: Ayudar a aquellos que te importan es un acto de compasión y amor, pero también es importante recordar amarte a ti mismo. Asegúrate de establecer límites saludables y comunica tus necesidades de una manera clara y respetuosa. Anima al inocente a desarrollar su propia fortaleza y resiliencia para que puedan tomar responsabilidad por sí mismos y reducir tu papel de cuidador o donante constante. Al permitirles ser más independientes, también podrás cuidar de ti mismo y mantener tu propia energía.
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Desarrollar la capacidad de crear una libertad emocional es una habilidad esencial para vivir una vida plena y significativa. Sin ella, es fácil quedarnos atascados en patrones limitantes de pensamiento y comportamiento, creencias limitantes, miedos paralizantes, roles y deberes que nos debilitan y nos impiden alcanzar nuestro verdadero potencial.
¿Qué tipos de robos de energía aparecen más en tu vida?… ¿Qué haces para solucionarlos?…