Un abrazo puede derribar barreras que a veces las palabras no pueden superar. Es un lazo estrecho que se establece entre dos personas, brindando consuelo, amistad, fraternidad, amor y compasión…
Los seres humanos florecen con el contacto entre ellos y, a menudo, languidecen sin él. Somos criaturas sociales por naturaleza. El simple acto de abrazar puede elevar el espíritu de una persona y hacerla sentir conectada con el otro. Cuando abrazamos a otro ser humano, dejamos de lado todo lo demás y nos centramos en ese abrazo.
El mundo a menudo es un lugar frío y distante. Construimos muros a nuestro alrededor para mantener a los demás alejados. En ese proceso, a menudo perdemos lo que realmente importa. Nos vemos atrapados en batallas por sobrevivir, olvidando que debemos hacer más que solo sobrevivir y existir. Debemos vivir. Este gesto abierto y genuino llamado abrazo puede, aunque sea por un momento, romper las barreras que tantas veces nos separan.
Lo que nos diferencia de las máquinas no es simplemente nuestra inteligencia y capacidad de razonamiento. En cambio, es nuestra capacidad de conectarnos a un nivel que solo un ser vivo puede experimentar y comprender. La conexión a través del tacto y el amor es una necesidad fundamental y una parte esencial de nuestra existencia que nos permite florecer.
Frases sobre el poder del abrazo
- «El amor no se puede envolver en una caja, pero puedes envolver a una persona en un abrazo.» Autor desconocido.
- «Después de millones y millones de años, todavía no tengo suficiente tiempo para describir ese pequeño instante de eternidad en el que pones tus brazos alrededor de mí y yo pongo los míos alrededor de ti.» Jacques Prevert.
- «Un abrazo silencioso significa más que mil palabras para un corazón triste.» Autor desconocido.
- «Los abrazos cierran la puerta al odio.» Tony Davis.
- «Los abrazos, los apretones de mano e incluso un toque intencionado transmiten energía útil para impulsar el mecanismo de la inmunidad en el cuerpo».
- «Los abrazos no requieren un equipo nuevo, baterías ni piezas especiales. Solo tienes que abrir los brazos y abrir tu corazón.» Jill Lobo.
